Al principio en las clases me sentía inseguro, algo incómodo y fuera de lugar, pero poco a poco fui ganando confianza, disfrutando de cada una de las clases que impartía y aprendiendo de cada uno de los movimientos de baile. 

Este trabajo me ha ayudado a mejorar mi estado físico, mental, emocional y también me permitió conocer gente nueva.  

Durante un tiempo solo lo vi este trabajo como una forma de sobrevivir, pero con el tiempo cada vez que recibía mensajes de alumnos expresando “No sabes lo mucho que me han ayudado tus clases para superar x situación” “todos los días espero con ansias esa hora para desconectar de mis problemas” y así como esos mensajes muchos más, fui siendo consciente del poder que tenía a través de cada clase aportar a la vida de mi entorno y convertí en eso mi mayor objetivo. Gracias a ello me esforzado en seguir formándome, trabajar en mi técnica, mis conocimientos y en seguir disfrutando de cada clase.  

He trabajado en diferentes gimnasios y formándome a la par en muchas disciplinas deportivas y de baile.  Ahora soy un instructor de Zumba y actividades dirigidas con grandes conocimiento y experiencia. Por lo que me siento feliz, capaz y con gran deseo de seguir ayudando a otros a mejorar su salud física, mental, superar sus miedos y a encontrar la alegría en el grandioso arte del movimiento, del baile y del deporte.